Concep, una de las seguidoras más empedernidas de Diano's Cook, y que hoy nos cuenta su historia relacionada con la gastronomía: cómo llegó a ella.
“Cuando tenía 20 años, vi que no sabía cocinar. Fui a mi
madre y le dije que me enseñara. El primer domingo me enseñó Paella y el
segundo… ¿Paella? ¿Por qué la primera paella no se parecía en nada a la segunda?
¿Por qué no tenía los mismos ingredientes? ¿¡Por qué?!
Entonces entendí que mi madre no sabía cocinar, “Ostias, y yo sin saberlo”, y con 20 años. Me apunté a cursos de cocina, libros, prácticas, inventos, etc. etc. Mientras, seguía trabajando y estudiando "para lo que yo valía".
Después de estudiar dos carreras, un master, un millón de seminarios y un trillón de cursillos para seguir preparándome para "lo que yo valía", voy y me quemo.
Oh, oh, oh… A veces los jefes son normales, y a veces son
no-normales, ¿qué pensabas? Me quemé como una cerilla pequeñita, “pim pam”, y me
fui, “bye bye, trabajo”.
Y como me defendía cocinando, o al menos eso decían, pues
pensé, “¿por qué no? ¿por qué no me pagan para hacer algo que me gusta,
disfruto, me satisface y me da gustirrinin?”.
Abandoné todos los libros, diplomas y demás en una caja, por si en un futuro lo necesitaba, y abrimos una tienda: “Slow food”. Ooooooh, que maravilla, ¡qué diferencia! Era feliz.
Nos preguntamos, “¿y si abrimos otra?” Pues ala, abrimos otra. Y nos preguntamos, “¿y si abrimos otra más?” Y venga, abrimos otra más. “¿Y otra? ¿No te apetece otra?” “¡NO NO NO! Si alguien quiere tener nuestra comida en su tienda perfecto pero nosotros, abrir más, no.” Y así, queriendo pero sin querer, tenemos ocho.
Mi vida es un puzzle de muchísimas piezas, a veces no sé porqué, pero no encuentro la siguiente, esa
pieza que me hace levantarme cada mañana con unas ganas tremendas de vivir.
Y de golpe, una persona a la que casi no conozco, pero que me cae bien, cuelga en Facebook, el “Proyecto Puzzle”, y sencillamente, me encanta la idea, paso un rato divertido, aprendo, hago fotos… Me encantan las
fotos. La fotografía mmmmmm tal vez, solo tal vez, sea mi próxima pieza.
Aquí tenéis las fotos de dos cositas que he cocinado hoy:
- Dados de bacalao confitado con all y oli espumado y tapanada de olivas.
- Filete de cerdo ibérico con mermelada de higos.”
Pues veréis… Si bien ella me da las gracias al final de su
escrito, por hacerla feliz por partida doble, ya que cocinó y fotografió para
el proyecto, dos de sus grandes pasiones, yo le agradezco encarecidamente que
haya participado, y sobre todo que haya compartido con nosotros su experiencia,
y su lucha por conseguir, finalmente, lo que quería. Una historia que me ha
conmovido, y que espero que aliente a muchos a seguir su ejemplo.
Gran historia. Me siento muy identificado, salvo que yo estoy en la fase de quemarme poco a poco... y pensando en cambiar e iniciar un nuevo puzzle.
ResponderEliminarUna historia muy inspiradora
Empecé quemandome poco a poco, lentamente y de golpe cogi carrerillaaaaaaaa y flax, toda quemadita, jajajaaj
ResponderEliminarHa sido una historia muy interesante de leer.
ResponderEliminarNosotros hicimos una celebración familiar y la empresa de Concepció Tort nos sirvió un amplio aperitivo exquisito y con una excelente presentació. ¡Felicidades desde Cal Marquet de Castelltallat!
Com sempre ets genial ! M'ha encantat llegir la teva història princesa.
ResponderEliminarConcepció Tort, Pinchitos, Empresaria i sobretot Amiga .... Muaks !!!
Sílvia